¿Tienes que hacer un regalo a un winelover y no tienes ni idea de vino? Te damos ideas más allá de una botella de vino.
Cuenta Monty Python que los tres sabios llegaron de Oriente a adorar al Niño guiados por una estrella… “¡Por una botella!” les gritó la desconfiada madre de Bryan, y al final se quedó sin oro, ni incienso ni mirra. Si eres tan friki como nosotros, ya sea del humor inglés, o del vino o conoces a alguien de esta especie cada vez más común, estos son los regalos que no te puedes perder.
Se trata de una selección hecha por nuestros profesores en su carta a los Reyes Magos.
Wine Education Week: You´ve got plans on September 9th at 18h!
The Wine Studio team has made an enormous effort to increase the pass rate of the WSET Level 3, and we’ve achieved that goal. Our school has always been above the international average, aiming to help our students thrive in both the theory and the tasting exam. This course is demanding, and students need to master the writing techniques as well as what we call “SAT” or Systematic Approach to Tasting in “WSET-speak”. After many years of correcting tasting exams, we’ve narrowed down the mistakes that come up regularly, and we want to draw your attention to them so that you can correct and/or avoid them. Here we go!
Para los que queréis aprender sobre vinos, sea cual sea vuestro nivel y vuestro objetivo, la tarea puede resultar muy complicada. Existen pocos centros de referencia y hay enormes saltos de nivel entre los cursos más básicos ofertados en tiendas de vinos, bares y restaurantes y los cursos para profesionales, dentro y fuera del entorno académico oficial.
Hace un año, más o menos, grabamos una clase del WSET en la antigua sede de The Wine Studio en la Calle Lope de Vega. Se trataba de una sesión del Nivel 2 de Vinos y Espirituosos en inglés. Ese día, catábamos Sauvignon Blanc y Riesling.
Sin categoría 7 marzo, 2014
Según las últimas estadísticas, somos el primer país productor del mundo pero consumimos la misma cantidad de vino que Dinamarca: 17 litros per cápita, frente a los 41 de Portugal o los 44 de Francia. Tengo mucho que decir sobre este tema, pero voy a empezar por los restaurantes (Y no voy a mencionar la crisis económica, que también tiene parte de culpa… ¡Pero en Portugal también hay crisis!)