REDESCUBRIENDO LA DIVERSIDAD DE RIBERA DEL DUERO

June 6 of 2024 - Current events

Os contamos algunos detalles de la ruta que hemos hecho por Ribera del Duero para recopilar información y redescubrir la denominación de origen. Estamos deseando presentaros un nuevo proyecto en el que queremos plasmar lo más relevante de esta dinámica región. Un río de vino. 

El encanto de los viñedos viejos

Nuestra ruta comienza en lo más alto: Fuentenebro. Allí la altitud y los viñedos recuperados nos dan la bienvenida. Aquí, nos maravillamos con la historia que yace entre las vides centenarias, testigos del tiempo y el esfuerzo humano por preservar la tradición vinícola.

Páramos y nuevas promesas

Continuamos nuestro viaje hacia Moradillo de Roa, donde la altitud y los páramos nos sorprenden. Entre nuevas plantaciones, vislumbramos el futuro brillante de la región, donde la innovación y la tradición se discuten, reflexionan y se unen para sacar el mayor partido al terruño. La Aguilera también nos sorprende con cerros que redibujan la orografía del paisaje,

Juventud, "divino tesoro"

En Castillejo de Robledo, encontramos algo diferente a la Ribera del Duero tradicional. Un valle reestructurado hace tres décadas nos ofrece un paisaje joven pero espectacular, que promete emociones nuevas y que puede ser el inicio del cambio de panorama de la denominación de origen en su conjunto.

Tesoros en las alturas

Pasamos por Matanza de Soria y nos dirigimos a Atauta, zonas donde los viñedos más viejos y las alturas desafían los límites de la Ribera del Duero. Sin ser la zona con más altitud, nos permite ver lo bien que modera el clima continental: descubrimos micro viñedos cargados de historia, que nos conectan con las raíces más profundas de esta tierra.

El valor de la orientación

La Vid, Hontoria, Baños de Valdearados... nos perdemos entre pequeños viñedos muy viejos y laderas bien orientadas. En estos parajes, la pasión por el cultivo se refleja en cada cepa, recordándonos la importancia de cuidar y respetar la tierra y sus frutos.

El alma de la Ribera

En nuestra travesía, visitamos Aranda de Duero y sus alrededores, donde la esencia de la Ribera se despliega en toda su magnificencia. Desde cerros que redibujan el paisaje hasta viñedos centenarios, cada rincón nos cuenta una historia única sobre el amor por el vino y la tierra. Pasamos por La Horra, Roa y Pedrosa de Duero: donde se conjugan viñedos de entre 60 y 100 años con viñedos más nuevos. Es el nuevo paisaje y la regeneración de la denominación: plantaciones más modernas diseñadas para aceptar una viticultura que combina vasos viejos y espalderas. Dos puntos de interés muy didácticos para ver la dimensión de la región: Valcabado de Duero y Haza, desde donde se ve el corte de la zona y su clara división y Pesquera de Duero, con la vega y el páramo, paisaje mítico de la zona. Olivares de Duero y Valbuena de Duero nos sirven para ver los extremos de la denominación y ya llegamos a Peñafiel, con el castillo siempre como referente para orientarnos con los próximos valles de Olmos y Pedraza. Todo tierra de viñedos con singularidades propias de suelos y orientaciones que juegan a lucir sus mejores floraciones (aún el fruto es menor) para la diversidad de perfiles que van a tener los vinos.

En la Ribera del Duero, entre valles diseñados por el tiempo y paramos que desafían los sentidos, comprendemos la grandeza de esta tierra que nos ha cautivado desde el primer momento.

Un Viaje Inolvidable

En nuestra travesía por la Ribera del Duero, hemos recopilado experiencias únicas e infinidad de apuntes. Cada rincón de esta región nos ha revelado la diversidad y la riqueza de su patrimonio vinícola, dejándonos con la certeza de que nuestro proyecto formativo reflejará con orgullo la grandeza de esta tierra que tanto amamos.

¡Hasta pronto, Ribera del Duero!